Como podéis observar, colocamos el banco SIEMPRE con una ligera inclinación. De esta forma, la línea de peso, va directamente al suelo, y no sobre nuestra zona lumbar, permitiéndonos cargar más peso, manteniendo la misma técnica y palanca.
Si no lo habías probado, hazlo, y me cuentas por aquí. Estaré encantado de ver tu opinión.
Si ya lo hacías así, ¡comparte esta entrada en mi blog para proteger las espaldas de tus amigos!